La directora de cine Agnès Varda ha recogido este domingo el Premio Donostia de la 65 edición del Festival de San Sebastián en un acto que ha tenido lugar en el Teatro Victoria Eugenia de la capital guipuzcoana.

"Me siento una premiada marginal", ha señalado la cineasta belga tras recoger este galardón de manos del director del festival, Jose Luis Rebordinos. El teatro entero se ha levantado para aplaudir a la cineasta, que no ha podido disimular su emoción.

"Es una sorpresa y un placer, es muy fuerte", ha expresado en español ante la audiencia que ha asistido posteriormente a la proyección del documental 'Caras y lugares', realizado con el fotógrafo y artista urbano JR.

Varda ha señalado que su cine nunca se encuentra cerca del "éxito comercial", una idea que unas horas antes ha desarrollado en la rueda de prensa que ha ofrecido, en la que ha reivindicado la "libertad" y la independencia del cine, así como la calidad y la experimentación.

La Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas de Hollywood entregará el próximo mes de noviembre a Varda, de 89 años, un Oscar honorífico por el conjunto de su carrera.

La cineasta cuenta en su filmografía con títulos como 'Cléo de 5 à 7' ('Cleo de 5 a 7', 1962), 'Le bonheur'' (La felicidad', 1965, Oso de Plata en el Festival de Berlín), 'Sans toit ni loi' ('Sin techo ni ley', 1985, León de Oro en el Festival de Venecia), 'Jacquot de Nantes' (1991), 'Les glaneurs et la glaneuse' ('Los espigadores y la espigadora', 2000, premio Gold Hugo en el Festival de Chicago).

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