El futuro es un "cine de cooperativa", augura el actor, famoso por la televisión pese a que su sueño es reinar en el teatro con su compañía - Ahora llega a los cines con la película 'En fuera de juego'.

Lleva ya cuatro películas de fútbol. ¿Qué le ven?

Es curioso porque por mi aspecto nadie lo diría. La cosa ya me empieza a preocupar. Las películas que se habían hecho antes sobre fútbol no habían funcionado, pero las mías son de las más taquilleras y gracias a una tengo un Goya, así que bienvenido sea el fútbol.

¿Quién está hoy en fuera de juego: Merkel u Hollande?

Creo que estamos los demás, porque nos han hecho un desmarque brutal. Merkel tiene cara de que todo esto le interesa un carajo, pero es a nosotros a quienes están manipulando y toreando como les da la gana.

¿Hay que sacar la tarjeta roja a los gobiernos?

Por supuesto. La roja y porque no hay una intermitente: nos están engañando y robando con una impunidad y un descaro que no sabes hasta dónde va a llegar. Me empieza a preocupar, porque esto tiene un tufo de tiempos atrás, como de posguerra encubierta. Me empieza a dar mucho miedo.

¿El cine está con una lesión grave?

Imagínese. Si antes era algo tópico lo de la crisis del cine español, ahora le estoy viendo las orejas al lobo. Ojalá me equivoqué, pero vamos a tener que hacer cine de cooperativa, como Paco León en Carmina o revienta. Estoy un poco desencantado. Este año se han hecho poquísimas películas.

¿Pitaría al Rey en una final de Copa?

Al Rey hay que darle una pastilla, porque creo que la medicación que se está tomando es muy equivocada (ríe). Si tenía algo que reprocharle, tras lo del elefante es ya para decirle "Vete de aquí, ¿qué estás haciendo? Dimite".

¿Se cansa de su imagen de gracioso?

Uno no se encasilla. Yo sé qué tipo de actor soy y lo he demostrado con películas como Cinco metros cuadrados. Pero es lo que tiene la televisión, lo que menos he hecho (tres años) y por lo que más se me conoce. De todas maneras, prefiero estar encasillado en la comedia que en el paro. Hay que defender también la comedia, bastante denigrada. Además, a mí me encanta el teatro, lo que siempre quise hacer, y mi sueño es formar mi compañía, producir teatro y acudir solo a lo interesante de cine y televisión.

¿En este país nos falta seriedad o nos sobra sentimiento trágico?

Ahora nos sobra sentimiento trágico. Hay que ponerle sentido del humor a lo que nos pasa. Lo que no se debe perder es el espíritu de lucha y positividad del 15-M. Que no nos invada esto de que no hay salida que nos quieren inculcar.

Dice Paul Auster, hablando desde EE UU, que hay mucho cine basura. ¿Es así?

Por supuesto, y más en EE UU que aquí, porque se hace más. Tiene que haber de todo, porque hay gente que le gusta la basura: solo hace falta poner la televisión y ver las audiencias. Si por mi fuera, haría películas de autor con historias que me tocaran, pero es lo que hay. Prefiero hacer películas como las que hago a estar de camarero.