El Hozono Jairis no falla y mantiene vivo el sueño

El Hozono Global Jairis hizo ayer buenos los pronósticos y venció al ya descendido equipo Bembibre en el Fausto Vicent (73-48). El choque tuvo momentos de letargo y falta de intensidad, que la entrenadora local Anna Montañana, desde la banqueta, y Carmen Grande en pista solventaron a mitad del tercer cuarto, cuando el conjunto de Alcantarilla anotó su primera canasta mediado de ese periodo.

El Jairis quiso finiquitar el partido por la vía rápida, quizás pensando más en el choque contra Gran Canaria por donde pasan bastantes opciones de entrar en las eliminatorias por el título. Por esa razón, Montañana sacó a su quinteto titular habitual, sin escatimar en esfuerzos y mostrando respeto a un Bembibre ya descendido. Las bercianas tuvieron el partido empatado durante las primeras canastas, pero finalmente la calidad de las ‘chicas de negro’ y los fallos en los tiros libres condenaron a las visitantes a ir a remolque en el marcador.

Sin embargo, el equipo de El Bierzo demostró mucho orgullo en la pista del Fausto Vicent, que rozó el lleno. Un equipo con una filosofía necesaria en estos tiempos de camino al superprofesionalismo del baloncesto femenino, un David que, tras 12 temporadas seguidas luchando contra los Goliat de la liga ha hincando la rodilla dignamente siendo puerta de entrada de mucho talento a la liga femenina española de baloncesto. Montañana rotó mucho la banqueta repartiendo minutos para evitar caer en el acomodo. Arrojo tuvo sus primeros minutos en un cuarto inicial que acabó con 18-9 para el Hozono Global Jairis de Alcantarilla.

Poco duró la tres del Jairis en la cancha ya que su falta de tono físico le llevó a cometer muy apresuradamente la tercera falta lo que obligó a Montañana a sentarla en la banqueta. El choque carecía de ritmo y por momentos era un correcalles, algo peligroso para los intereses de las ‘chicas de negro’ ya que en partidos donde reina la anarquía cualquier cosa puede suceder. Por eso, los esfuerzos de Anna Montañana estuvieron dirigidos a que sus jugadoras mantuvieran la tensión. En ese instante las locales consiguieron su máxima diferencia en el partido al ganar de 13 puntos (25-12). Pero el ritmo denso del choque hizo que, en algunos momentos, el Jairis perdiera la intensidad y provocase que Bembibre bajara de los diez puntos de diferencia (27-18). Esto conllevó un tiempo muerto para reordenar la mente de las jugadoras locales y pedirles un punto de intensidad defensiva, sobre todo, en una línea exterior que golpeaban las jugadoras entrenadas por Bea Pacheco con demasiada frecuencia. Tras ese tiempo muerto y una nueva aproximación a nueve puntos de las bercianas (35-26), Rembiszewka cerró el segundo cuarto con un triple para poner el 38-26.

El comienzo de la segunda parte no pudo ser más desesperanzador para el público asistente, en los primeros minutos de este periodo sólo una canasta de Bembibre fue lo único que echarse a la boca. A los 5:28, Carmen Grande anotó la primera canasta en juego de las locales tras culminar una penetración a canasta. Demasiado poco bagaje, muy poca intensidad que de tener enfrente otro equipo que no fuera el descendido Bembibre le podría haber costado un susto a las ‘chicas de negro’. Fue el ‘efecto Grande’ el que despertó de su letargo al equipo, tras la canasta de la base local, sus compañeras Lou López y Horvat se sumaron al partido para apuntalar la máxima diferencia del partido +22 (50-28) a falta de 1:31 para que acabase el tercer cuarto. Tras arreglar esta falta de intensidad, Montañana dio entrada a Sole Molina para que la joven jugadora disputara unos minutos en Liga Endesa y cerrase este periodo con un mas 23 (52-29).

El Jairis jugó el último periodo con su segunda unidad. Montañana dio minutos a las menos habituales para que perfeccionaran los sistemas o los integraran aun más como el caso de la australiana Horvat que junto a Rembiszeka terminaron como máximas anotadoras. Las de Montañana piensan ahora en visitar la cancha de un Gran Canaria que esta cuajando buenos números en su pista y, sobre el papel, es el partido más complicado para que las de Alcantarilla alcancen el objetivo de finalizar entre las ocho primeras clasificadas.