´Bebe música, come arte´ es el eslogan que han elegido para presentar su nuevo restaurante, tras un rodaje de cinco años en su anterior ubicación en el murciano barrio de El Ranero. El matrimonio formado por Juan Antonio Pujante y su mujer Jimena Morales Chaparro nos proponen, desde el pasado 5 de enero, un espectacular espacio gastronómico en su nuevo Cátame, situado en pleno centro de Murcia (a espaldas de El Corte Inglés), más concretamente en la plaza Entrejardines.
El cuñado de Juan Antonio, hermano de Jimena, el chef Gonzalo Morales Chaparro, especialista en crear exitosos menús para locales como él llama ´escondidos´, ha creado el alma de la nueva carta del local tras una dilatada experiencia en ciudades como Toledo, Dublín, Mallorca, Madrid, Puerto Banús o Marbella. Gonzalo es un apasionado de su trabajo y lo traslada a la espectacular carta que nos ofrecen en su nuevo recinto, con capacidad para más de cien comensales cómodamente instalados en un amplísimo local repleto de detalles decorativos donde podemos encontrar desde ángeles y una escultura de Stan Laurel y Oliver Hardy, hasta lámparas de diseño italiano, y en cuyas paredes cuelgan obras, de gran formato y llenas de significado, originales del otro hermano de la familia, el pintor Nacho Morales. También es de su autoría el espectacular trabajo de talla en cristal de las puertas del gran reservado del local, con capacidad para una treintena de personas.
Ofrecen, de martes a domingos, tres menús: el de día, por 15,50 euros, que incluye dos platos y postre, a elegir entre nueve posibilidades de primeros y ocho de segundos; el de noche, por 22,50 euros, a elegir entre ocho primeros y trece segundos platos, y el menú de domingo, a elegir entre ocho primeros y nueve segundos. Menús, de raciones más que generosas, que se pueden compartir entre dos personas por un incremento de tres euros. La idea es que cada día que accedamos al local podamos elaborar nuestro propio menú sin que tengamos que repetir plato tras múltiples visitas.
En cualquiera de los tres menús encontramos platos espectaculares como la ensalada de medallón de queso de cabra gratinado, con vinagreta de frutos del bosque, miel de violeta y reducción de módena; su dúo de croquetas de solomillo asado a las finas hierbas y de centollo, lenguado, caviar y langostinos; la originalísima sopa de besugo y rape ´al estilo de un marinero que conocí en un puerto lejano´, o las entrañas de ternera a la parrilla, con sal en escamas y salsas varias.
En el menú de noche degustamos la espectacular ensalada templada con salteado de calamares, ajetes, espárragos, gambas y langostinos; la chuleta ibérica con salsa de salvia fresca y orejones de melocotón; el cochinillo lechal con salsa Pekín o la suprema de atún a la plancha con salteado de gulas. Cuentan con una extensa carta de vinos y cavas, con especial acento en los vinos de la Región, y antes de marchar podemos escribir una frase o un deseo y colocarlo en una de las paredes del local con los que más tarde editarán un libro.
