El paseo marítimo del Puerto de Mazarrón amplió el pasado mes de noviembre su espectacular oferta gastronómica con la apertura de la nueva etapa de la Tapería y Freiduría La Perra Chica, de la mano del experimentado hostelero David Colmenar Pérez. El nuevo local, decorado con un especial encanto, rinde homenaje con su nombre a las antiguas pesetas, ya que la ´perra chica´ era el nombre coloquial con el que se denominaba a la moneda de cinco céntimos debido a que presentaba en su anverso el relieve de un extraño león que la gente confundía con un perro.
Situado estratégicamente hacia la mitad del paseo, cuenta con excelentes vistas a la playa del Puerto, ya sea desde el interior del local, con capacidad para 30 comensales, donde nos llamará la atención las espectaculares pizarras decoradas por Garrigós y la decorativa barra forrada con cajas de vinos, o en su amplia terraza cubierta con capacidad para unas 90 personas, donde nos sorprenderán las cubiteras para enfriar el vino sobre auténticas cepas de vid. También cuentan con seis barriles con taburetes a la puerta del local para disfrutar de su amplia oferta de tapas, pescados y mariscos.
El mar, protagonista
Los productos del mar son protagonistas indiscutibles de la oferta de La Perra Chica, como podemos comprobar en su menú degustación que, por 25 euros, nos ofrece mejillones en escabeche, croquetas de jamón, queso chaumes con pimientos caramelizados, tartar de atún, alcachofa con velo de tocino, dorada o lubina en suprema o secreto ibérico además de postre y una botella de vino o refrescos.
Cuentan con una amplísima oferta de tapas, elaboradas por María José Cazorla, esposa de David, con la ayuda de sus cuñados Fernando y Rocío y de Julio Alberto Decillis quienes nos ofrecen sus anchoas en salmuera o boquerones en vinagre, ensaladilla y hueva de mújol, patatas con boquerones, queso explosivo, tostas de chiquillo caliente y latas de anchoa Codesa, berberechos Arlequín y mejillones Ramón Franco. También sirven raciones de pulpo al horno, timbal de block de foie con mermelada de cerezas, setas enoki, carpaccio de champiñón, chanquetes fritos con huevos rotos y jamón ibérico, bolsa de codillo de cerdo con champiñones, zanahoria y pasta brie, patatas bravas y alcachofa con velo de tocino ibérico. Son espectaculares sus croquetas de sepia en su tinta con alioli con soja y flambeado; sus ´Pelochos´: croquetas de jamón ibérico con fideos finosm, y su timbal de calabacín relleno de rabo de toro.
Entre sus pescados destacan su boquerón frito o a la plancha, la molla de merluza al cava, el tataki y el tartar de atún rojo, los calamares, sepias y chipirones, y su sorprendente lubina o dorada, que sirven desmenuzada sobre una pizarra con espinas crujientes totalmente comestibles.
En el apartado mariscos cuentan con zamburiñas, almeja japónica, chirla, mejillones al vapor y en escabeche, gambas al ajillo y gamba blanca y roja.
Aunque preparan arroces para llevar de todo tipo, no debemos dejar de probar su particular arroz con pulpo y, además de excelentes embutidos y quesos, también cuentan con montaditos, hamburguesas y carnes como su solomillo de buey, lomo bajo de buey, secreto ibérico, timbal de rabo de toro y el ala de pato rebozada en quicos con manzana.
Después de las cenas o comidas, no debemos dejar pasar su plato al centro de postres variados con coulant de chocolate, tarta de dulce de leche, trufas y fresas con una espectacular nata casera.
