Viajar en tren es un placer. No, no nos referimos a coger este medio de transporte a diario para ir a trabajar, soportando en ocasiones aglomeraciones y retrasos. Nos referimos a coger algunos de los trenes que te presentamos en estas líneas para disfrutar desde la ventanilla de la espectacular belleza los paisajes que recorren. Un viaje sin prisas, lleno de encanto y romanticismo que nos permitirá gozar con una experiencia que sin duda no podremos olvidar jamás.

The Ghan

Este histórico tren de pasajeros inaugurado en 1929 une Adelaida con Darwin, en Australia. En total, 2.979 kilómetros que The Ghan -abreviación de The Afghan Express- cubre en nada más y nada menos que 54 horas, con una escala de cuatro horas en Alice Springs. Un viaje de cinco estrellas y a todo lujo para disfrutar del fascinante y salvaje paisaje del interior de Australia.

Bergen Line

Este tren une a lo largo de sus cerca de 500 kilómetros las ciudades de Oslo y Bergen. Se trata de la línea ferroviaria más alta del norte del continente europeo y permite gozar con espectaculares vistas a los fiordos, con sus paisajes montañosos y glaciares. En total, unas 7 horas de viaje entre bellos pueblos de montaña y estaciones de esquí.

Tren de las nubes

Desde las ciudades argentinas de Salta hasta el Viaducto de La Polvorilla, en Argentina, este tren es capaz de ascender hasta los 4.200 metros de altura en un recorrido mágico por la Cordillera de los Andes. En total, el ferrocarril, con capacidad para algo más de 400 pasajeros, recorre 434 kilómetros en 16 horas, a una velocidad media de 35 km/h, ideal para disfrutar del paisaje.

Transiberiano

The Golden Eagle Trans-Siberian Express es probablemente el tren más famoso del mundo. Reformado tras una inversión millonaria, este lujoso convoy permite completar el trayecto en tren más largo del mundo. En total, 10.000 kilómetros entre Moscú y Vladivostok que el tren recorre en dos semanas pasando por paisajes llenos de encanto que nos permiten disfrutar de la exuberante tundra siberiana.

Darjeeling

También conocido como el 'tren de juguete', en este ferrocarril las prisas no están permitidas, ya que su velocidad media apenas supera los 10 kilómetros por hora. Esta lentitud, no obstante, no supone ningún problema cuando se observan desde la ventanilla los espectaculares paisajes del Himalaya. Declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, el convoy recorre desde 1881 los casi 80 kilómetros entre Siliguri y Darjeeling.

Hiram Bingham

Este tren de gran lujo no apto para todos los bolsillos inicia su recorrido en la ciudad de Cuzco para llevar al viajero en tres horas y medio hasta el Machu Picchu (Perú). Durante el recorrido, los afortunados que se suben al convoy de vagones azules y oro pueden disfrutar del maravilloso paisaje de los Andes al cruzar el valle sagrado hasta llegar a la mítica ciudad inca.

Rovos Rail

Está considerado como uno de los trenes más lujosos del mundo, con confortables vagones en los que se mezcla el clasicismo con la modernidad. Solo 70 pasajeros por trayecto son los que admite este hotel-tren que recorre los cerca de 1.600 kilómetros entre las ciudades sudafricanas de Pretoria y Ciudad del Cabo, permitiendo al viajero disfrutando de la flora y la fauna de la sabana africana.

Bernina Express

Este tren permite a sus viajeros disfrutar de algunos de los paisajes más bellos y maravillosos de los Alpes, recorriendo las ciudades de Coira (Suiza) y Tirano (Italia). Declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, este ferrocarril atraviesa 55 túneles y 196 puentes a lo largo de sus 122 kilómetros de recorrido, en los que el viajero pasa de 500 metros sobre el nivel del mar a casi 2.300.