Antonio Resines ha rgresado a la televisión con 'Aquí paz y después gloria', la nueva comedia de Telecinco en la que interpreta a Paco, un estafador que usurpa la identidad de su hermano gemelo, un sacerdote.

Esta serie le ha permitido coincidir de nuevo con Antonio Molero, el conocido 'Fiti' en Los Serrano. La pareja de actores se reencuentra siete años después, dispuestos a seguir sacando carcajadas al público.

Al margen de sus trabajos como actor, Antonio Resines preside la Academia de Cine de manera provisional hasta que se convoquen elecciones el próximo mes de mayo. Un puesto que le llegó tras la dimisión de Enrique González Macho y en el que no tiene ganas de seguir por incompatibilidad de trabajos.

P: ¿Qué tal te ves como presidente de la Academia de Cine?

ANTONIO RESINES (AR): Las elecciones son el nueve de mayo y estaré hasta que salga otro, no puedo decir más.

P: ¿Te gustaría seguir como presidente?

AR: No me gustaría seguir presidiendo la Academia de Cine, pero eso no quiere decir que no vaya a seguir. Es complicado, y si tienes trabajo es más complicado aún. Hace falta una dedicación y un tiempo que no se si tendré. No se pueden hacer las dos cosas a la vez, es un cargo estupendo y se pueden hacer muchas cosas en la academia, pero si tienes trabajo es muy difícil.

P: Es difícil compaginar la serie y la presidencia...

AR: Sí, si te levantas a las seis y vuelves a casa a las seis de la tarde y tienes que estudiar no te da tiempo a ir a los compromisos. Al presidente es al que invitan a todos los sitios y tienes que ir a reuniones. El presidente o la presidenta, y no digo más.

P: ¿Tenías ganas de volver a la televisión?

AR: Sí, de hecho en esta historia llevábamos ya tiempo. Me apetecía hacer una serie y que fuese comedia, ha costado pero lo hemos conseguido. No nos hubiesen dejado hacer ocho capítulos si no les hubiese gustado.

P: Se te ve con muy buena sensación...

AR: Es que está bien, he visto los capítulos y está bien. Está mal que lo diga, pero llego a reírme conmigo mismo. Conmigo y con el resto de la gente, las situaciones son divertidas y espero que le guste a la gente.

P: ¿Qué fue lo que más te atrajo del personaje?

AR: Hago dos papeles, pero el cura desaparece muy rápido, en el primer capítulo tiene un accidente y no sabemos qué pasa después. Me apetecía mucho interpretar a una canalla, a un jeta, a un sinvergüenza, y así es el otro personaje. No es malo pero es simpático, tiene buen fondo. Te cae bien porque de vez en cuando hace cosas que no están mal.

P: ¿Te congracias con él?

AR: Para que funcione te tienes que creer algo de lo que hace. Es un tío que no tiene moral, es la antítesis del cura, lo que hace no le parece que esté mal. Es un inmoral y no tiene la sensación de que esta pecando, entiende que ha venido a la vida para vivir como Dios y para eso necesita dinero.

P: Además es un hombre que se dedicaba a la construcción...

AR: Sí, al principio cuenta llorando a cámara que ha estafado a trescientas familias y monta un número para engañarlas, eso ya lo veréis.

P: ¿Cómo ha sido volver a trabajar con Antonio Molero?

AR: Es muy importante, para mí ha sido un aliciente. Es un actor espléndido y una persona estupenda, además nos entendemos muy bien. Hemos trabajado mucho juntos y ahora cambiamos los papeles. En Los Serrano él era más jeta y echado para adelante y yo era más buena personas. Aquí es un poco al revés. Desde el primer momento se vio que cuando nos juntábamos la gente se reía.

P: ¿Tenéis amistad fuera de cámaras?

AR: Sí, lo conozco desde Los Serrano.

P: ¿Te da miedo que os comparen al volver a trabajar juntos?

AR: Creo que ha pasado bastante tiempo. Al principio nos proponían cosas juntos y a las cadenas no les gustaba mucho y a nosotros tampoco. Pero ya no, aunque ponen la serie todos los días. Es algo que no me preocupa.

P: ¿Qué tal lo de tener que ponerse la sotana?

AR: Bien, lo de los botones es lo peor para las cosas fisiológicas, pero no voy a dar más detalles (ríe). Sotana llevo muy poco.

P: ¿Has tenido que aprenderte muchas cosas para hacer de cura?

AR: No, más o menos me lo sabía porque de pequeño había sido monaguillo. Tuve mi momento espiritual pero después lo dejé. Ahora no tengo relación con la vida religiosa. Tengo una preparación brutal para este personaje, fui monaguillo hasta los doce años.

P: ¿Fuiste a un colegio de curas?

AR: Sí, conozco esto para lo bueno y para lo malo. Fui a un colegio de curas desde los seis hasta los dieciséis, fui a El Pilar, pero no al que han ido Aznar, Wert o Rubalcaba, yo iba a otro.

P: ¿Cómo crees que verá tu personaje el sector de la población más religioso?

AR: La gran mayoría de ese sector no le va a dar importancia. El personaje que hago yo no es un cura, se viste de cura porque es un estafador. Todo lo que pasa dentro de la iglesia no tiene que ver con la Iglesia. Lo único que tiene es un hermano cura con el que hace veinte años que no se habla.

P: ¿Qué recuerdos te ha traído volver a los estudios Picaso?

AR: Tengo el mismo camerino que tenía en Los Serrano, he vuelto después de seis años y está muy bien.

P: ¿Cómo ha evolucionado la ficción desde Los Serrano

AR: No creo que haya cambiado tanto, sí de alguna forma técnica o estética. Desde que el mundo es mundo las comedias funcionan si lees el guion y te ríes. Lo fundamental es una buena historia, un bien guión y unos buenos actores, con eso tienes mucho ganado. A pesar de eso también hay series que no funcionan, pero no hay una gran diferencia.

P: ¿Tienes algún proyecto de cine?

AR: Sí, la continuación de La niña de tus ojos, La reina de España. Repetimos prácticamente el mismo reparto. Estamos Penélope, Santiago Segura, Bonilla y Neus Asensi, un reparto curioso y más incorporaciones. Rodaremos a finales de este año creo.