Después de tres exitosos años regentando The Factory en el Paseo Colón, frente al Club Náutico de La Ribera, el joven matrimonio formado por el murciano Alejandro Vives (La Raya) y la leonesa María José Tocino (El Bierzo), decidieron desde el pasado mes de octubre traerse a la zona de las tascas de la capital murciana una más que amplia selección de la oferta gastronómica que ofrecen a orillas del Mar Menor basada en sus hamburguesas americanas cien por cien con carne de black angus certificada que reciben directamente desde Arkansas.

«Picamos a diario la carne de babilla que nos llega envasada al vacío -explica Alejandro- del mismo modo que preparamos a mano cada una de nuestras salsas como el kétchup, la salsa ranchera o la barbacoa. Lo único que no preparamos nosotros es la mayonesa. También cuidamos al máximo que nuestros productos sean de la máxima calidad».

La madera es la reina de la decoración del pequeño y coqueto local que ocupa The Factory, que cuenta con capacidad para unas cuarenta personas sentadas en sus mesas con taburetes y unas diez más en la barra. Nos llamará la atención su suelo con baldosas hidráulicas y la enorme plancha metálica en una de sus paredes, con pequeños cuadros de vacas 'poperas', un original huerto vertical y las regaderas metálicas sobre las mesas con los cubiertos.

Cuentan con un menú de mediodía, de lunes a viernes -de 13 a 16 horas-, que incluye un primer plato a elegir entre tiras de pollo, patatas bravas, cheese and fries, nachos con guacamole, ensalada César o ensalada de queso de cabra; un segundo a elegir entre cinco tipos de burgers, pechuga de pollo, o cualquiera de las dos ensaladas anteriores, además de primera bebida y postre o café. También ofrecen menús cerrados para grupos a partir de 20 euros y todos sus platos pueden ser para llevar.

Su especialidad son lógicamente las hamburguesas de carne de ternera recién picada 100% black angus a la parrilla con pan artesanal servidas con patatas y salsas caseras. Once deliciosas variedades que se pueden pedir normales, dobles (por tres euros más) o en versión mini. No debemos dejar de probar las de buey, la americana o la Ibérica con carne de cerdo ibérico a la parrilla. También cuentan con hamburguesas vegetarianas con espinacas, garbanzos, cebolla confitada, pepinillos y soja destexturizada.

Pero también podemos comer excelentemente sin probar sus hamburguesas, pues su carta incluye entrecot de ternera, pechuga marinada a la parrilla o costillas a la barbacoa BBQ Ribs.

Cuentan con cuatro ensaladas como la de burrata y una decena de entrantes, de los que podemos pedir una o media ración entre los que destacamos su pulpo a la brasa con alioli de almendra y pimentón, su tartar de atún y aguacate, sus nachos y supernachos o el excelente carpaccio de black angus con queso parmesano, rúcula y vinagreta. También podemos pedirnos brochetas de pollo satay, ibérico, black angus o chupachups de atún y membrillo. Preparan además cuatro tipos de sandwiches y pan bao con cangrejo de concha blanda o ibérico con salsa hoisin. De sus postres destacamos su New York cheese cake o su deliciosa panna cotta Thai. Entre sus vinos ofrecen media docena de referencias de la Región, Ribera, Rioja y un sorprendente vino alemán Riesling de Mosel, además de cervezas de trigo y la murciana artesana Pajiza.