Haberse embarcado en una aventura hostelera en plena época de crisis económica, allá por 2011, no le ha imposibilitado al restaurante Lamarimorena convertirse en uno de los locales de referencia de cocina moderna en Molina de Segura.

Con los productos de la región muy presentes en sus servicios, los toques vanguardistas y las inspiraciones de otras cocinas a lo largo y ancho de todo el planeta conforman una seña de identidad que funciona, como explica Juana María Ruíz, dueña y chef del restaurante: «Siempre intentamos trabajar con los pies en la tierra, la tierra murciana, para mantener vivas nuestras raíces, aunque aplicamos ciertos matices modernos que marcan un poco la diferencia». El wok de verduras de la huerta con sepia y gamba roja, o el matrimonio en luna de miel, con una tosta acompañada de remolacha y aceituna verde, componen algunas de las tapas que tan bien reflejan este modo de trabajo.

El local, ubicado en una zona en expansión, cuenta con una terraza en dos alturas, y varios salones acompañados por un reservado con capacidad para 20 personas.

Seguridad acreditada

Lamarimorena se sitúa como una de las opciones gastronómicas más seguras de Molina de Segura, al haber invertido en medidas de protección contra el coronavirus como las alfombras desinfectantes, o dispensadores automáticos de gel hidroalcohólico, lo que le ha valido el reconocimiento otorgado por el municipio a restaurante preparado para la covid-19.