Inma Cuevas encarna el papel de Anabel en Vis a Vis, la presa más temida de Cruz del Sur.

Su impecable trabajo en la ficción le valió un Premio Ondas a la Mejor Intérprete Femenina de Ficción Nacional y el Premio a la Mejor Actriz de Reparto de Televisión de los Premios de la Unión de Actores. La madrileña habla sobre el presente y el futuro de la serie estrella de Antena 3, que se enfrenta ahora a la recta final de su segunda temporada.

Anabel es más odiada incluso que Zulema. ¿A qué se debe? ¿Descubriremos en Anabel un poco de ´humanidad´?

Creo deducir que es porque Anabel es oscura, sibilina, nunca sabemos por donde te va a atacar. Se aprovecha de los débiles, y eso le hace más odiada, a pesar de que Zulema es capaz de asesinar, cosa que Anabel, en principio, sería incapaz de hacer.

¿Cómo ve la evolución de la ficción española? ¿Es Vis a Vis un punto de inflexión?

Creo que no me equivoco si afirmo que es una de las grandes series del momento. Una serie internacional que está rompiendo fronteras y que está recibiendo grandes reconocimientos.

En las escenas de Anabel el espectador nunca sabe qué va a pasar. ¿En algún momento lo ha pasado mal trabajando alguna escena?

Mi escena más complicada fue la de la lavandería con Maggie, en la que Anabel quería cortarle los pezones a Maca. Fue dura de rodar, yo no hacía más que estar pendiente de ella y de esas tijeras atrezadas que me daban terror. Todo estaba muy controlado, pero daba impresión.

Su mirada transmite mucho al espectador. ¿Cuál es su punto fuerte, interpretativamente hablando?

Gracias. Creo que soy muy afortunada por dedicarme a la profesión que siempre soñé. He aprendido a disfrutar de mi trabajo y a poner toda la carne en el asador. Intento ser honesta con mi trabajo, soy disciplinada e intento dar el 200%. Es por eso que con Anabel busco aprovechar cada secuencia y transmitir todo su mundo interior en cada plano.

¿Necesita un actor de experiencias de la vida, como se suele decir, para ser bueno en su trabajo?

Tengo la teoría de que cuanto más verdadero, honesto y auténtico eres en la vida, más lo eres en el escenario o en un plató. Las experiencias en la vida siempre suman, pero uno no tiene que haber vivido algo para interpretarlo. Para eso los actores entrenamos mucho la imaginación, la memoria sensorial y emotiva.

¿Qué significa la interpretación en su vida?

La libertad.

¿Tiene el trabajo de un actor una parte mística?

Para mí sí, es fundamental. Hay algo que traspasa, que modifica al otro, algo intangible. Cuando la energía se transforma ocurre la magia. El sueño de todo actor, supongo, es acariciar el corazón del otro. Eso es un acto sagrado.

Decía Daniel Grao en una entrevista reciente: "Comprendí que eso que yo consideraba más oscuro y negativo en mi vida era oro para ser actor, y sentí que sanaba". ¿Ha tenido alguna vez esa sensación?

Leí esa entrevista y entendí perfectamente a lo que se refería. Muchas veces nos negamos a nosotros mismos, pero cuando sabes de verdad quién eres consigues sacarle partido y potenciarlo. Poner todo tu yo al servicio del oficio: esa es la clave. Pero hay que llegar a esa conclusión.

¿Qué proyectos tiene en el horizonte? ¿Se siente satisfecha en este país o piensa en trabajar fuera?

Ahora mismo estoy en la sala Kubik Fabrik de Madrid con un espectáculo entrañable, dirigido por Fernando Sánchez-Cabezudo, hasta el 26 de junio. Y a la vez, estoy inmersa en los ensayos de una comedia musical dirigida por Yayo Cáceres y con dramaturgia de Álvaro Tato. Estoy cerrando algunos proyectos más para otoño de los por ahora no puedo dar datos, pero por los que me siento muy contenta. Hace años tuve la oportunidad de trabajar en Londres con un musical y fue una experiencia muy enriquecedora. No me cierro puertas a nada.

¿Es más, o menos cómodo meterse en el papel de ´la mala´?

Cuando un actor se siente cómodo está perdido. Cuanto más incómodo, hay más para buscar, más para vibrar, más para enriquecer. Es incómodo porque lo que representas está lejos de los valores y de los cánones del bien, pero para mí ha sido un trabajo complejo y muy enriquecedor.

¿Es Anabel el papel de su vida?

Anabel me ha hecho crecer y explorar otras facetas, otros registros que nunca había hecho. Afortunadamente, en mi carrera me he encontrado con personajes muy hermosos. Trato a cada personaje como si fuese el personaje de mi vida.

Conseguir ser el personaje más odiado por los espectadores, ¿es un logro interpretativo?

Por supuesto. Así lo creo. Es un gran elogio pensar que has conseguido transmitir lo que los guionistas y los directores querían.

¿Cómo vive el visionado de cada capítulo?

Los veo como cualquier espectador enganchado a su serie favorita, soy fan de Vis a Vis. No solo la veo, sino que hacemos quedadas entre los compañeros de la serie para verla juntos. Cada capítulo es una fiesta.

Al principio la gente comparaba Vis a Vis con Orange Is The New Black. ¿Ve alguna influencia?

Por supuesto, es una serie que habla sobre la vida de mujeres en una cárcel. Y hasta ahí la influencia. Existen otras series carcelarias, pero aquí no son tan conocidas. Orange es una serie llena de comedia, Vis a Vis es un puro thriller.

¿Cómo viven las personas que trabajan en una serie los cambios de programación?

Personalmente intento no darle mucha importancia. Quita mucha energía y es un gigante contra el que no podemos luchar.

¿Qué le falta a la cultura en España?

Que de verdad se le dé el lugar que le corresponde. Por desgracia, llevamos un déficit muy grande. Falta un mayor apoyo tanto privado como público, y es imprescindible que tenga mayor peso a nivel educativo.

Hellen Mirren declaraba que, como actriz, "es inevitable lidiar todo el tiempo con la inseguridad y las dudas". ¿Es algo que ´va en el paquete´?

Los actores somos seres inseguros por lo general, siempre expuestos a la mirada del otro. El arte es muy particular, debemos liberarnos de gustar a todo el mundo.

¿Qué sorpresas nos depara Vis a Vis? ¿Habrá tercera temporada? ¿Cuál es la clave de su éxito?

Un final de infarto. Por el momento no sabemos si habrá tercera temporada, tendremos que esperar. La clave del éxito consiste en apostar por un gran guión, una factura impecable, un equipo de primera y rodearse de un elenco creíble.

¿Ha notado algún cambio en su vida con esta serie?

Mi vida sigue siendo la misma. La gente te reconoce más por la calle y alaba tu trabajo, eso es estupendo. La serie me ha reforzado como actriz, y por ello doy gracias.